Los encontramos en la almohada. Se quedan entre nuestros dedos. Salen enredados en las cerdas del peine con el que nos peinamos. Los recogemos de la rejilla de la ducha. Son los cabellos que a diario se nos caen, naturalmente. Las mujeres suelen perder de 100 a 150 al día; en los hombres, entre 70 a 120. La caída del cabello es un asunto cotidiano.
El problema ocurre cuando la caída del cabello se vuelve demasiado abundante y notoria. Entonces puede tratarse de un problema hereditario, hormonal o algún factor específico. En el caso de las mujeres, lo más común es que la pérdida sea de volumen, no una alopecia masiva e irreversible como ocurre con los hombres, los más afectados por esta condición.
Si pasados entre tres y seis meses, ese cabello perdido no se recuperara y se siguiera perdiendo. «Si apreciamos que esto ocurre entonces debemos ponernos en manos de un especialista, ya que podría tratarse de una alopecia androgenética o de alguna otra patología, bien capilar o bien relacionada con la salud de nuestro organismo”.
– Notar una pérdida considerable de cabello, superior diariamente a unos 100 pelos. Lo mejor es observar la almohada al levantarnos.
– Se pierde densidad capilar.
– El cuero cabelludo comienza a clarear, ya sea en la coronilla, en la zona de la frente, lo que se conoce como entradas, o en la parte superior de la cabeza, las más habituales.
– Se siente sensibilidad, dolor, picor o alguna otra molestia en el cuero cabelludo, señal de que podemos estar padeciendo alguna patología, como la dermatitis.
– El cabello está más grasiento o comenzamos a tener caspa, dos problemas que inducen la caída del cabello. No obstante, hay diversos tratamientos preventivos para la caída capilar, sobre todo cuando el problema se debe a una patología, y no está producido por enfermedades tiroideas, tumores, anemia, trastornos autoinmunitarios o estrés, entre otras.
La causa más común de esta caída en ambos sexos es la alopecia androgenética, que aunque suele ser hereditaria, también tiene su causa en un incremento de la acción de las hormonas masculinas o andrógenos. «Por ello, en las mujeres sucede más con la llegada de la menopausia o en el caso de sufrir alteraciones hormonales, como las derivadas del ovario poliquístico».
«En dermatología capilar cada vez tenemos técnicas más avanzadas que nos permiten ser muy optimistas a la hora de realizar un diagnóstico precoz y prescribir tratamientos para combatir los problemas de alopecia de una forma más efectiva».
El primer paso del especialista será realizar un estudio tricológico, un análisis microscópico de la raíz y cuero cabelludo, una analítica y una historia clínica pormenorizada para averiguar las causas exactas que originan la caída del cabello, para después aplicar el tratamiento más adecuado.
Tratamientos efectivos para evitarlo
La mesoterapia capilar, tratamiento a base de microinyecciones que contienen una combinación específica de fármacos y otras sustancias en el cuero cabelludo, es uno de los tratamientos de los que una persona con el problema puede beneficiarse.
También podemos optar por el plasma rico en plaquetas, una solución compuesta por un alto concentrado de plaquetas que se obtiene con la centrifugación de la sangre del paciente. Este plasma, en muchas ocasiones, puede ser de ayuda en la recuperación capilar.
Centro Médico Azuaje